CONDENADO A
MUERTE.
A 20 de noviembre de 2014.
Buenos días, buenas tardes y buenas noches. Bueno, así
querría despedirme de mi consciente después de llevar dos horas despierto, o
eso es lo que yo creía. Puesto que, después de abrir una vez más mis ojos y volviéndolos
y removiéndolos dentro de mis párpados, como limpiaparabrisas, para desempañar
las telarañas de la noche, o del vaho de mi cansada y despistada vista, miré
una vez más hacia un reloj digital, con números en rojo, cosa que dificulta
todavía más mi falta de luz y lucidez mental, a esas horas ya pasadas las cinco
de la mañana. Ya que sin encender la luz, el brillo del reloj y sus números es
mucho más intenso, pero esto no supone para mí una ventaja, aunque si lo sería
para otro ser humano. Y esto no es debido a ninguna lógica, ni lucidez, ni
inteligencia, ni estupidez, ni siquiera por la tempranera hora, sino que más
bien, esto me ocurre por una razón natural, que nada tiene que ver con la
racionalidad, ni la irracionalidad de estos tiempos en que nos toca vivir. Sino que más bien, y mejor que bien, es porque sufro o gozo de una alteración natural, en la
percepción de mi vista, que supongo que, nada tiene que ver esta, con ninguna
alteración hormonal, aunque no sería de extrañar, que todo estuviese relacionado,
con todo lo me conforma aunque no esté aquí mencionado. Bueno, esta pequeña
inconformidad rebelde de mi vista, dicen que se llama daltonismo, que me parece
que esto nada tiene que ver con el alpinismo, ni con el optimismo, pero como
suena bien y hoy en día todo se liga a algo; ¿por qué no? ¡Digo yo!
Bueno, todo esto que os estoy diciendo venía a cuento, de
algo que me parecía de cuento chocolatero y churrero. De algo que después de
encender la radio y cambiar de emisora, me sonaba a voz de cuento anochecido
proveniente de un recuerdo de sueño mañanero difuso, y confundido por la
ensoñadora lucidez de esa conciencia que no sabe si todavía tiene ganas de
despertarse del todo, o darse media vuelta en la cama, para seguir soñando que
está dormida. La verdad es que una pequeña parte de mi conciencia lúcida, se
quedo con aquella pequeña y minúscula noticia, que pasaba de largo por mis
sentidos racionales. Más esto de por la mañana temprano de dejar pasar de largo
las noticias, ya no tiene mucha importancia para mí, ya que se ha convertido en
costumbre desde que mis sentidos andan un poco atrofiados, por una conciencia
que cansada de habitar en este “mundo tortilla española a la revuelta” de: todo
un poco, para a todos los sabores contentar, y a todo tipo de paladar gustar,
de tal manera que, la Torre de Babel, se queda corta, comparada con la actual
Torre de Emociones, con que la humanidad anda perdida y diseminada de
sentimientos, para contentar a todos, y a todos tenerlos bien confundidos, y,
con modernos ideales de viejos esclavos renacidos. Todo vale, con tal de crear
estados democráticos confundidos. Y todo vale con tal de crear confundidos
estados de derecho. Y todo vale con tal de crear confundidos estados
democráticos de libertad, porque así los ciudadanos confundidos con tanta
democracia, estado de derecho y libertades, se creen todo lo que les quieran
hacer creer, y, se creen de todo lo que les quieran convencer. Y se creen que
cualquier partido político nuevo que aparezca en el horizonte, les prometa la
libertad, la igualdad, la paz, la justicia, etc., y esto, es tan solo, el gran
triunfo de la confusión, porque, ningún nuevo partido político puede triunfar
en la verdad, en la justicia, etc., debido a que detrás están los mismos que
respaldan a los cansinos partidos de siempre. Más los que os doblegan con los
látigos de la libertad, de la igualdad, de la paz, la justicia, son
precisamente los que apoyan estos nuevos movimientos políticos, y, por supuesto
son, los que después de hacer prometer todos estos bienes ideales humanos, son
los que, a cambio de sus falsas promesas, nos ofrecen con todo su amor y
cariño, el doble de tazas de esclavitud, etc. ¡Y se dicen entre ellos
refiriéndose a los ciudadanos!: ¿Queréis una taza libertad? ¡Tomad dos de esclavitud!
¿Queréis una taza igualdad? ¡Tomad dos de desigualdad, discriminación, racismo,
jerarquización, etc.! ¿Queréis una taza de justicia? ¡Tomad dos de injusticias
y con sobre abuso de poder! ¿Queréis una taza de paz? ¡Tomad dos o tres, o
cuatro, o cinco de guerra!
¡Qué ilusos tan confundidos! ¡Tan confundidos ilusos! ¡Que
ya no sabéis lo que es aparente engaño, o es una mentira acreditada! ¡Pero esto
lejos de ser una de vuestras victorias, no lo es, ya que es lo que yo os vengo
prometiendo desde hace años! ¡Pero como vosotros no creéis en verdades, sino
que os han educado, y acondicionado, tan solo para creer a los mentirosos, nada
os resultará como os prometen, sino que cada vez, tendréis más y más tazas, de
todo lo contrario a todo cuanto os prometan! ¡Pero esto es lo que os conviene,
para que así reventéis y escarmentéis algunos, no todos! ¡Porque la mayoría no
me interesáis! ¡Pues solo estoy aquí por algunos que todavía valen la pena, que
yo siga penando en este vulgar mundo! ¡Mundo al que la mayoría de los seres
humanos habéis elevado al rango de mundo vulgar, por lo habitual de la
vulgaridad de vuestras emociones y sentimientos, rebajados por la autoestima
sobre elevada del feminismo, la homosexualidad, narcos, blanqueadores de
capitales, ricos, empresarios, drogadictos, etc., que mangonean los gobiernos,
los estados, las políticas, las religiones, los supuestos derechos humanos, los
supuestos estados de derecho, las supuestas libertades, las corruptas
democracias, las borrachas culturas, enseñanzas, borrachas educaciones en
nuestras escuelas, colegios, institutos, universidades, aprendizajes, etc.! ¿Todavía seguís pensando que comprendéis
lo que es dignidad? ¿Pero como vais a comprender siquiera lo que es dignidad,
si vuestras conciencias están adulteradas y enseñadas a creer que supuestas
corruptas y esclavas realidades, son la libertad, son la paz, son la justicia,
son la igualdad,? ¿Pero como vais a comprender la verdad, si a todas las
paredes y dimensiones de vuestra mundo y realidad, las han pintado con bonitos
colores de mentiras? ¡No sabéis lo que es verdad, porque la verdad no os ha
sido enseñada! ¡Y no sabéis lo que es la verdad, porque tan solo conocéis las
verdades de las mentiras! ¡No sabéis que es la verdad, porque os han dicho,
aprendido y enseñado, a escoger entre mentiras verdaderas, y mentiras
mentirosas!
Bueno, por todas estas cosillas de na (nada). “Es que yo por
la mañana suelo en tardar en digerir todas la mentiras a medias, mentiras a
calcetines, mentiras a tazas, mentiras con leche, mentiras con café o cola cao, mentiras con pan, tostadas, mantequilla, con
huevos, y mentiras madrugadoras o
trasnochadas, etc., que se cuentan en los medios de comunicaciones, para mirar
con paciencia al cielo, y, resignarme un día más, para, diferenciar mientras
termino de despertarme, aunque no me apetezca, entre las mentiras verdaderas, y
las otras mentiras. ¡Y, esto no es nada fácil! Pero bueno, cuando llevaba ya
dos horas supuestamente despierto, porque ahora ya me resulta cada vez más difícil
despertarme, porque la vida despierta y vespertina, la vida vulgar y común,
cada vez resulta parecerse cada vez más a terribles pesadillas, que sería
preferible no experimentar o vivir, porque, la vida parece ya un experimento científico
de homosexuales y feministas, donde lo que más mola, es la modernidad, el
progreso y la gran evolución, el gran salto evolutivo de nuestro actual mundo
de Sodoma y Gomorra. Porque como decía, después de digerir las nuevas mentiras
con que pavimentan y apuntalan nuestras realidades cotidianas y rutinarias,
mientras trataba de agudizar mis oídos girando de vez en cuando mi cabeza hacia
la radio, para cazar cierta noticia que no acababa de digerir o de oír bien, ya
que mis oídos no andan bien desde hace un mes, ya que uno me duele un poco, me
zumba al oído, y el otro me chilla en la oreja, etc., porque tengo un tapón de
cera, y ya algo de infección, y me resisto a acudir al médico, porque algunos (Incluidas
algunas enfermeras) han querido eliminarme, volverme un vegetal, etc., y,
claro, a gato escaldado, ya se sabe. Y, así estoy, corriendo el riesgo de que
esto se me derive en algo más grave, pero, así llevo muchos años, luchando en
solitario con todos mis problemas, sean de salud o no, y tratando de confiar en
Dios, porque si Este me falla, ¿qué importancia tendría ya mi vida, o, para
quién ya tendría importancia mi vida? Porque bien que os habéis esforzado
algunos de que mi vida no tuviese un refugio, un hogar, una compañía, etc.,
pero esto será una factura que pienso cobrar, y no va a prescribir, no va a
caducar, porque ya está grabada y bien escrita en vuestras almas, y, aquí a
vuestras almas, no podéis llegar con los borradores de mentiras, o con amaños,
o con maliciosas argucias, ni realidades manipuladoras. Porque aquí no pueden
llegar a influir vuestros intereses emocionales corruptos. Porque aquí, en
vuestras almas, no llega a mandar vuestro vulgar poder. Porque aquí, en
vuestras almas, no mandan vuestros sentimientos, pasiones y deseos, y emociones
de vulgares animalillos, que deciden irracionalmente, lo que debe parecer
racional. Aquí en este terreno de lo sutil y elevado, de lo espiritual y de lo
escondido de la vida animal, no mandáis, no domináis, no tenéis poder, porque
este es mi terreno, porque este es mi mundo, porque esta es mi realidad, y,
porque aquí vive la verdad, y, porque aquí es el mundo de lo verdaderamente
real.
La verdad, no sé para qué, os cuento o digo estas cosas. ¡De
todas formas, que esto, no os preocupe, porque vuestro mundo también es real, y
vuestro mundo también es verdad, y, es por eso, que NO estáis siendo juzgados
de mentira! ¡Sino que os aseguro, que a pesar de que sea verdad, que vivís en
mundos reales construidos con mentiras, estáis siendo juzgados de verdad!
¿Acaso pensabais que como vivís en mundos y realidades construidos con
mentiras, ibais a ser juzgados de mentira? ¡Pues no! ¡Esto no cuela! ¡Porque si
pensáis que vais a ser juzgados de mentira y en base a mentiras establecidas
como legales y legalidades, además de ignorantes, es que sois tontos! ¡Con perdón
de los verdaderos tontos, ya que estos son más bien santos, que vienen a ver
transcurrir su tiempo, sin intervenir, ni tener responsabilidades en estas
generaciones, porque ya han llenado su cupo! ¡Ya os gustaría estar entre estos
tontos santos! ¡No, vosotros no sois tontos santos! ¡Vosotros sois tontos
listos! ¡O sea que sois los verdaderos tontos! ¡Porque los tontos santos, son
tontos de mentira, porque en realidad son santos! ¡Pero vosotros la mayoría
sois tontos listos, tontos de verdad, porque sois ignorantes de verdad, y sois
los tontos o cómplices de estos, que regeneráis una y otra vez este mundo
tonto, en un mundo cada vez más atontado! Bueno, si no comprendéis todas estas
cosas que os digo, es porque sois más tontos de lo que creía. Nota: con punto y
seguido: Y es que quiero aclarar bien una cosa, y es que si os llamo tontos, no
es porque yo sea listo o me dé más inteligente que vosotros, sino de más
humilde y sencillo, porque en Dios y sus Enseñanzas, Orientaciones y Mandatos,
se encuentra la sencillez, lo vulgar, la humildad, de la verdad. Pero
precisamente por ser la verdad de Dios, tan poca cosa, tan vulgar, tan sencilla
y humilde, así es despreciada, porque vosotros os creéis en vuestra ignorante
tontería superiores a todo esto, y en vuestra ignorante tontería hasta os creéis
superiores a Dios, ya que lo despreciáis, le faltáis al respeto, y lo ignoráis
bajo vuestros arrogantes pies, al apropiaros de sus Verdaderas Creencias,
verdaderas Orientaciones, Verdaderos Consejos y Enseñanzas, y Verdaderas
realidades de Verdadera Libertad, con que, se abrirían automáticamente unas
puertas mágicas dimensionales de las cuales estamos compuestos, haciéndonos
penetrar en nuevas dimensiones de gozo, de verdadera justicia, de verdadera
paz, de verdadero amor, y de verdadera felicidad, al traspasar
las puertas estelares dimensionales, que es hallan escondidas en nuestras
almas, y, que tan solo estas PUERTAS ESTELARES DIMENSIONALES DE NUESTRA
ALMA, SE ABREN CON LAS LLAVES DEL CUMPLIMIENTO DE LOS DIEZ MANDAMIENTOS DE LA
LEY DE DIOS. Y, para comprender estas cosas, comprender estas cosas de Dios, no
es porque sea o me crea yo más listo que vosotros, sino todo lo contrario, que
más bien, es, por tratar de ser o imitar, la humildad y la sencillez, de los
tontos santos.
Bueno, pero todas estas cosas, no tienen importancia. ¡Y no
tienen importancia, porque vosotros no queréis dársela! ¡Y, comprendo
perfectamente que no la tenga, porque para vosotros no tiene atractivo, ni
interés, el querer pareceros en lo más mínimo a los tontos santos, ya que
vosotros sois tontos listos! Y la mayoría sois mucho más estudiados que yo, y
sacabais mejores notas, y rendíais mejor en un mundo de mentiras, falsedades,
cuentos, hipocresías y maldades. La verdad es que yo no me veía capacitado para
aprobar, lo que vosotros nunca deseabais suspender. Es así de cruda la realidad
que tenía que duramente masticar ya desde mi temprana infancia, entre depresión
y depresión. ¡Qué pena y gran tristeza, que Dios me hubiese ahorrado tantas
angustias y sufrimientos, si me hubiese dado el regalo de haber nacido como
tonto santo! ¡No he tenido esa inmensa suerte! Más Dios, que todo lo sabe y es la Suprema
Inteligencia, cuando mi conciencia reventó debido a unas graves experiencias,
me dio a beber del vino de la paz, y me permitió dormir en ese estado de los
tontos santos, donde el tiempo aunque pasen los días, no parece existir, porque
siempre todo es nuevo y nunca nada es viejo. Si, tuve esa gran suerte, de que
Dios me hiciese entrar en esa dimensión de la sana despreocupación durante unos
años, más como todo lo bueno pronto se acaba, y en este caso todavía más porque
el tiempo parecía estar detenido. Aunque fuese de noche y volviese a ser de
nuevo día, aunque fuese por la mañana o por la tarde, era igual, siempre
parecía estar todo suspendido de atrasos o prisas. Siempre parecía estar todo
suspendido, de los antes o los después, Y esto era bueno. Y esto me hacia bien,
porque así tampoco existía el aquí y el ahora. Porque el aquí y el ahora,
también eran el antes y el después. Y así todo estaba para mí bien, porque no
pensaba en el mal, ni deseaba el mal.
Sí. Me encontraba bien, porque no pensaba, solo sentía que
formaba parte de todo lo que me rodeaba, y con toda naturaleza fluía y ritmaba,
sin hablar, sin moverme, sin bailar ni cantar. Sin embargo, Dios me requería
para otras cosas, y, entre atisbos de lucidez mundana, y atisbos de lucidez
cotidiana de la realidad tonta de verdad, no de la realidad tonta de los tontos
santos. Pues entonces mi buen Dios, que ya había decidido que ya se me habían
acabado las vacaciones en el Paraíso, empezó a dejar que mis sentidos empezaran
por veces a pensar, a ver, a oír, y a sentir las cosas vulgares del mundo que
me rodeaba, y ocurrió, y puedo adivinar que no fue por casualidad, que cayeron
en mis manos unas fotocopias de unos apuntes en unos folios escritos en una
máquina de escribir manual, sobre cómo supuestamente se realizaba un ayuno de
cuarenta días, y que todo lo curaba. Y, yo, que no estaba convencido de todo
esto. Pues esto de pasarse cuarenta días sin comer, parecía una aventura para
visitar el más allá y no regresar. Bueno, al principio no hice caso, y no le di
importancia, pero entre que estaba y no estaba, y me encontraba y me perdía,
empezó a rondarme la idea del ayuno, para ver si de una vez por todas me
encontraba ya de una vez, y no me volvía a perder. Total si eso del ayuno, no
resultaba ser cierto y me moría, ¿qué se perdía? Puesto que ahora, ya no estaba
en el reino de los tontos santos, ni el reino de los tontos listos. Estaba con
un pie en un lado, y otro pie en el otro lado. Estaba con un ojo puesto en un
mundo, y con el otro ojo puesto en este otro vulgar mundo. Y así no estaba en
ninguna parte. Y así pensaba que ya iba a transcurrir todo lo que de vida me
quedaba. ¿Qué perdía con arriesgarme a hacer el ayuno? ¿Y si era verdad que un
ayuno de cuarenta días lo sanaba todo? ¡Tardé muchos meses en decidirme y
convencer a la que entonces era mi esposa, de que eso del ayuno era una cosa
muy normal, y que también Jesucristo lo había llevado a cabo, etc.! La verdad,
es que yo no estaba convencido de nada, ni sabia la verdad sobre esto, pero ya
no me importaba, yo quería curarme, sanarme, volver a estar en este mundo y ser
uno más, y ahí fue como empezó mi primer largo ayuno, que alargué más allá de
los cuarenta días, hasta los cuarenta y tres días, esperando la mágica curación
a todos mis males y enfermedades, que todavía no notaba cuando llegó mi
angustioso cuarenta día de ayuno. La verdad, es que no sé si fue debido a
tantos días sin comer que me noté mejor, más espabilado, pero no apreciaba las
tales mágicas sanaciones y curaciones, que se anunciaban en los apuntes del
ayuno de cuarenta días. Por lo que me sentí engañado y defraudado, y como
estafado, sabiendo que me habría podido quedar en el camino. Pero bueno, mejor
algo que nada, porque había podido dejar los tratamientos médicos, y estaba no
más lúcido, sino más bien más espabilado. Y al recuperarme físicamente del
ayuno, comprendí que este despabilamiento tal vez fuese debido a la ausencia de
los tratamientos. Pero yo no quería volver a tomarlos, porque además mi
estomago e hígado según algunos análisis estaban inflamados, y con la poca
lucidez que me quedaba, intuía, que con tantos tratamientos poco iba a durar. Y
ocurrió que al no tomar tratamiento, entré en unos años de ansiedades,
paranoias, estrés, angustias y sufrimientos, que parecían no tener fin, y atormentarme
día y noche. Por lo que me vi recurriendo de nuevo a nuevos tratamientos
médicos, donde me aguardaba otra gran sorpresa del destino, porque, algunos
médicos intentaron con medicación, convertirme en un vegetal, o semi-vegetal. Por
lo que, para conseguir un tratamiento
para liberarme de las angustias y sufrimientos, tuve que simular ser un semi-vegetal,
para que no volviesen a intentar convertirme de verdad en vegetal. ¡Yo tan solo
quería sentirme aliviado de aquellas terribles angustias que anulaban mi razón
y me ahogaban como si el aire careciese de oxigeno, mientras mis órganos se retorcían
desesperados contra mis pulmones, culpándolos de no desear respirar y bombear
el fluido, el ánimo de la vida, mientras estos (los pulmones), mirándome, se
encogían de hombros sin saber qué hacer, ni cuando respirar profundamente, y,
yo cuando notaba que mis pulmones me miraban esperando una reacción, una
respuesta, una orden, inspiraba de vez en cuando, como si de pronto se me
hubiese olvidado de seguir respirando! ¡Y esto ocurría todo el tiempo! Y yo,
quería buscar solución parar este estado de muerte silenciosa, y, tan solo deseaba
sentirme bien, a pesar de que algunos de vosotros os empeñabais en convertirme
artificialmente en un tonto santo, al intentar convertirme en un vegetal, o
semi-vegetal. Pero ahora en esto Dios, no quiso ayudarme, y siempre con milagro
o no, me ayudó a superar tan tremendas situaciones, para supuesta e ingrata
lucidez mía, que nunca me aportó más que angustias y sufrimientos. Lucidez por
mi tan perseguida por querer parecerme a vosotros, y con la cual parecéis
disfrutar y supuestamente fingís ser felices. Lucidez y cordura mundana, con la
cual me acusáis de ser y estar loco. Y supuesta locura mía que una y otra vez
trato de curar y sanar, con los ya cinco grandes ayunos que llevo, sin contar
los pequeños ayunos y sacrificios de todo tipo para ayudarme supuestamente a
estar sano o un poco más cuerdo. Más a pesar de todo esto, y a pesar de
acusarme de loco, soy un loco que le ha echado más cojones a la vida y haberme
enfrentado a la muerte, por encontrar vuestra supuesta cordura. Vuestra
supuesta cordura, sí, esa cordura de que tanto presumís muchos. Esa cordura de
la que tanto presumen vuestros ricos, vuestros empresarios, vuestros
gobernantes, vuestros más altos titulados, y por supuesto, esa cordura de que
presumen las fuerzas de seguridad de los estados, para con toda cordura,
reprimir a los otros supuestos cuerdos, que tan solo quieren que cambien
algunas cosas, para seguir construyendo un mundo de corduras homosexuales,
feministas, falsas igualdades, falsas justicias, falsas promesas de paz
prometiendo la guerra, falso amor, promoviendo un amor egoísta, un amor sexual
negociado y manipulado, y prometiendo una felicidad que se consigue promoviendo
la esclavitud, etc. ¿Para esto algunos os creéis hombres? ¿Para todo esto le
echáis huevos? ¡Ni siquiera a esto se le puede llamar ponerle huevos a ningún
asunto, porque solo servís al mal y para empeorarlo todo un poco más cada día! ¡Porque
vuestras luchas son para redundar y ahondar todavía más en las locuras y
perversiones de la verdad, y sumergirse en esas supuestas libertades que os
esclavizan cada día un poco más! Ciertamente que cada vez profundizáis más y
más, en vuestras corduras de construir un mundo más y más demencial, y mucho
más confuso. Y para esto, para sumar más y más, de esa cordura, sobre esa supuesta
cordura de vuestros ricos, empresarios, gobernantes, religiosos, políticos,
maestros, profesores, etc., necesitáis echarle huevos, para nada más que, para conseguir
un poco más de esa cordura, que hace que perdáis el Norte, El Sur, El Este y el
Oeste de la vida, de la naturaleza, del sentido común, de la verdad, de la sana
cordura. No de esa otra cordura, la de vuestros mandamases, con que todos
construís la realidad tan supuestamente ideal de todos nuestros días y de todos
nuestros hijos y nietos. ¡Vaya forma de demostrar a vuestros hijos y nietos,
cuanto les apreciáis y cuanto los queréis! ¡Hipócritas, mentirosos, y
falseadores de las sanas realidades! ¡Decoráis gustosamente la realidad de cada
día, con la fantasía de vuestras locuras enfermas de injusticias,
discriminación, de jerarquización, de desigualdad disimulada! ¡Decoráis con
alegres sonrisas la realidad de cada día de sufrimientos y angustias, con que
alimentáis las almas de los niños, enseñándoles que esto es felicidad, esto es
alegría, esto es libertad, esto es lo mejor y más evolucionado! ¡Tomad hijos,
tomad niños de toda la Tierra, desayunad, para que estéis bien alimentados de
las fantasías, y mágicas maravillas, de este mundo que os guste o no, tenéis la
obligación de tragar! ¡Tomad hijos y nietos queridísimos, llenad vuestras
barrigas del alma, con la libertad innatural de alimentar vuestros egoísmos, y
con la libertad tan progresista de alimentar los instintos animales, más
progresivamente que los animales, porque nuestra cordura, la cordura
progresista y la más evolucionada, la más perfecta de vuestros mayores, esa,
esa cordura tan elevada y tan sutil que ya no toca el suelo, sino, por tan
pura, ha alcanzado el éxtasis, y que hace que sea normal que un hombre se
sienta mujer, y que una mujer se sienta un hombre, porque se han perfeccionado
tanto y han llegado tan alto, que ya están por encima de la naturaleza, y que ya
creen que viven en la perfección de una naturaleza, que aunque creen que no es
fantasía o locura inventada, lo es, porque, tampoco existe todavía en la
realidad de una sana naturaleza. Porque lo que ellos creen que es cordura, no lo
es. ¡Porque lo que creen ellos que es alta evolución natural, tan solo es
locura y enfermedad! ¡Tan solo es naturaleza enferma! Ciertamente que es
naturaleza también, pero de la naturaleza mala, que lucha contra la naturaleza
buena. Porque, ¿Cómo podría existir buena naturaleza, si no existiese mala
naturaleza, o contranaturaleza? Lo que no es de cuerdos, es confundir la buena
naturaleza, con la mala naturaleza. Lo que no es de verdaderos cuerdos, es
practicar la locura y hacer progresar y evolucionar, y, perfeccionar más y más,
la mentira y además legalizarla, el robo y además legalizarlo, la explotación
de los semejantes, llamado también trabajo y además legalizarlo, y el asesinato
y además legalizarlo convenientemente, y etc. Para hacer todo esto no hace
falta tener huevos, sino que hay que ser unos tontos listos, frustrados y
fracasados, que tan solo le encuentran sentido a sus vidas si se sienten y comportan
como unos degenerados y malvados. ¡Tener verdaderos huevos, es estar loco como
yo, que por más esfuerzos que hago para volverme cuerdo como vosotros, siempre
fracaso, y, por fracasar una y otra vez, intentáis eliminarme para que deje de
dar la nota, y para que no se me note, y pase desapercibido, y a mala fe, que
hasta ahora lo habéis conseguido¡ ¡Pero como soy un loco y doy la nota, y para
intentarlo una y otra vez, ponerle huevos es demasiado suave, demasiado sutil
para mí, tan sutil que, me hace falta algo más que huevos, por lo que también
tengo que ponerle cojones, a esto de, querer atrapar vuestra cordura, que es
tan sutil, elevada y pura, que se me escapa de entre los dedos, por más que
intento sujetarla!
No sé para qué os digo estas cosas tan vulgares y, por
simples y sencillas, ridículas. Porque vosotros sois tan inteligentes, que no
necesitáis que un tonto os diga estas cosas. Bueno, porque como antes os decía,
al escuchar las noticias mañaneras en la radio, había una de ellas que no
acababa de asimilar, que no llegaba a comprender, porque todavía no estaba muy
espabilado, ni concentrado en ellas, ya que por la mañana, no pongo toda la
atención en la radio aunque la siga escuchando, porque suenan más alto mis
recién cocinados calentitos pensamientos, aunque algunos de ellos me sepan a
precocinados. Por lo que, entre mis oídos uno taponado y el otro medio
taponado, y el ruidoso desayuno de recién cocinadas emociones y guisados
sentimientos, y olorosos y crujientes pensamientos, me tardo en concentrar en
las noticias, que poco a poco, y a razón de ser repetidas una y otra vez, al
cabo de unos minutos, algo se me va quedando. Pero había una, que se me
resistía, porque no la entendía bien. No la acababa de entender o de encajar en
la realidad, ni de asimilar ni en mi locura, ni en vuestra cordura. Y me decía
que, o que tenía que subirle mucho más al volumen de la radio, o pararme
delante de esta, concentrado, para tratar de encontrarle sentido a aquella
esquiva noticia que se me escapaba de la normalidad comprensiva. Hasta que por
fin, después de subir un poco más el volumen de la radio y estar más despierto
y concentrado, por fin, logré escuchar normalmente aquella noticia que se
escapaba a mi razonamiento. Y era, que un hombre había matado a su marido,…etc.
¿Ah, entonces había estado escuchando relativamente bien? ¡Pues parecía ser que
sí! La verdad, tengo que reconocer que si tardaba en asimilar esta noticia y su
comprensión se me hacia tardía, era por el lugar del País de donde provenía
este suceso. Que era de una región del norte de España, donde se dan y se
suelen criar los más hombretones del Norte, o sea del País Vasco. Bueno, aunque
aquí en Galicia, también hace tiempo que han llegado también estas modas tan
evolucionadas de la homosexualidad. Tan evolucionadas, que Sodoma y Gomorra
todavía no existían, cuando ya ciertos culos ya eran famosos y mucho más
evolucionados, quizás por aquí en nuestras tierras (¡Y que Dios me perdone por
ser tan grosero, ante tanta y tanta evolución, progresismo y alta pureza!). Y,
tal vez, algún día en las excavaciones arqueológicas, se lleguen a encontrar
culos vascos, gallegos, etc., fosilizados de la era de los dinosaurios, para
así poder constatar, que la homosexualidad de ahora es perfecta y mucho más
progresista y evolucionada. ¡Dios mío, perdóname por ser tan grosero, pero ya
estoy harto de tratar a la grosería de este mundo con delicadeza y sutileza!
¡Oh mi Dios, sé que me perdonarás, por tener que de vez en cuando llamarle por
su nombre normal, por su nombre vulgar a las cosas de este mundo! ¡Ciertamente
mi Dios, es que, este tipo de noticias, aunque ya hoy en día han pasado a ser
normales, hasta para los hombretones del País Vasco, y, también han pasado a
ser normales para los gallegos, que somos los únicos capaces de competir con
los vascos, yo, no acabo de asimilar con fluidez este tipo de noticias y de
normalidades! ¡Quizás sea que me estoy volviendo demasiado viejo muy pronto, o
es que los tiempos van tan deprisa que me quedo atrás! ¡Sí! ¡Esta noticia así
en frío por la mañana de: “Un hombre en el País Vasco asesinó a su marido”! Tardé
en comprenderla y asimilarla. Pero bueno, una vez que me adapté a esta
realidad, y sintonice un poco mi
conciencia a esta realidad, ¡la vuestra claro! ¡Enseguida lo comprendí y le
encontré sentido, con tapón de cera en los oídos y todo!
¡Oh, mi Dios único y verdadero, permíteme seguir loco,
porque así mi Señor de los mundos, tengo disculpa para no aceptar estos malos
tiempos, tiempos de sus corduras, que me ha tocado vivir!
¡Oh, mi Dios todopoderoso, permíteme seguir loco, aunque
para ello signifique que los cuerdos me hayan condenado a muerte, por seguir
tus caminos, y por extraviarme buscando tu reino y tú justicia en este mundo!
Cristo Maestro Andar.
RESPUESTA A UNOS JÓVENES QUE ESTÁN PENSANDO EN CAMBIAR LA
POLÍTICA MEJICANA, DEBIDO AL ASESINATO DE LOS 45 ESTUDIANTES:
A 16 de noviembre de 2014.
Difícil cometido os espera si pensáis o deseáis cambiar todo
esto, porque las mafias se han apoderado de vuestros políticos y del gobierno.
Pero no solo de vuestro gobierno. Sino que las mafias han tejido telarañas de
poder en casi todos los gobiernos de todos los países de este vulgar mundo, y,
sobre todo, en el gobierno de USA., que se volverían todos locos de rabia, si
de repente les faltasen todo tipo de drogas a las cuales están ya tan
acostumbrados. Además de que los estadounidenses, son los que controlan a todas
las demás mafias de este mundo. Desde hace algún tiempo, USA, es el Gran
Padrino de todas las mafias que existen en este Planeta. Y, no estoy solo
hablando de mafias de narcotraficantes, sino de todo tipo de comercio, de
manipulación política, económica, religiosa, armas, adoctrinamientos sociales, etc.
Cristo Maestro Andar.