22
de febrero de 2020.
LA IGUALDAD Y LA DESIGUALDAD
(Entre especies humanas).
Queridos
hijos (Por sus frutos los reconoceréis), espero que al recibo de la presente
entendáis que yo soy el Jesucristo esperado para esta época (Cristo Maestro
Andar), y a pesar de que llevo internado aproximadamente dos años en un centro
siquiátrico (Hospital de Calde en Lugo, España), y por mis síntomas deduzco que
llevan tiempo envenenándome casi todos los días con pequeñas dosis, para
provocarme lentamente tumores , canceres, etc., para que mi probable muerte,
aparente ser una muerte natural. Sé que lo están haciendo porque siempre los analisis me dan las defensas de mi cuerpo bajas y además porque, me conceden
frecuentes permisos para salir del centro siquiátrico, y siempre que almuerzo,
meriendo o ceno, fuera del centro, no siento nada anormal, me siento bien, me
siento como debiera ser. Sin embargo, cuando desayuno, almuerzo y ceno, en el
centro siquiátrico, al momento se me inflama el estomago y todo mi vientre,
sufriendo un poco más tarde molestias y pequeños dolores en la zona de mi hígado,
vesícula, páncreas, tripas, riñones, espalda y hasta en la zona de la vejiga,
próstata, y también además de sentirme mareado y confuso mentalmente. Deciros
también que desde que me ingresaron por primera vez por orden judicial en este
centro, me inyectaron dos inyecciones una cada mes, que me sacaron todo tipo de
concentración y se me anularon las ganas de escribir y de proseguir con mi
blog, también un cambio radical en mi incapacitante sexualidad, Y esto ya me
parecen demasiados síntomas y casualidades, pero además sospecho que en algún
punto de la cadena alimenticia se están añadiendo tóxicos o venenos, en
pequeñas cantidades, como para que no se sospeche que mi muerte se deba a un
posible envenenamiento. Quiero recordaros que las feministas fanáticas y
radicales, me odian a muerte, y que disponen de un gran poder sobre la sociedad
de nuestros días, y no dudarían en convencer a otras mujeres u hombres, para
que llevasen a cabo sus planes, bajo diferentes medios de presión y amenazas,
sobre todos o algunos empleados de la sanidad pública o privada, o demás. También
recordaros que la tarea de envenenarme les resultaría muy fácil y sencilla,
porque a los enfermos nos vienen las comidas personalizadas en bandejas con el
nombre del paciente al cual van dirigidas y que incluso proceden de otro
hospital provincial llamado por sus siglas
“El Hula (Lugo, España), en donde comienza la cadena de la alimentación
que pasa luego por varias manos, hasta llegar a los pacientes del Hospital de
Calde (Lugo, España) donde yo estoy internado. ¿Acaso en algunos de mis
trabajos anteriores no predije que buscarían excusas para internarme en un
hospital para tratar de acabar con mi vida? Y así lo hizo por primera vez aquí
donde me encuentro, un juez, con la excusa de que con mis ayunos ponía en
peligro mi vida. Bueno, era una buena excusa que le servía estupendamente,
porque cuando judicialmente me mandó internar, se daba la casualidad que había
más de dos años, de mí por aquel entonces, había realizado ya mi último ayuno.
Y, de que además, yo ya tenía ya, mucha experiencia en ayunos y que en estos,
lejos de poner mi vida en peligro, me ayudaban a salvarla. ¿Qué sería de
Jesucristo, si hace más de dos mil años, le prohibiesen hacer su ayuno de
cuarenta días? ¡Yo os lo diré, que no curaría sus males y no podría llevar a
cabo, las obras y la sabiduría a la humanidad, y sobre todo, a los hombres de
buena voluntad! Os lo digo, porque yo sé que cuando Jesucristo decidió hacer su
ayuno de cuarenta días, padecía una grave enfermedad, puesto que los ayunos no
se hacen por deporte, sino que está demostrado que antes que Jesucristo, otros
profetas y hasta el Profeta Moisés, realizaba ayunos de cuarenta días sin comer
alimento alguno, tan solo agua, para sanar sus graves enfermedades y así
cumplir con su cometido de conducir a su pueblo, al lugar elegido por Dios. Y
ni los Profetas, Mensajeros de Dios, ni Moisés, ni Jesucristo, ponían en
peligro sus vidas al realizar sus ayunos, sino, que la mejoraban y la salvaban,
y ESTOS, ESTABAN GUIADOS POR LA VOLUNTAD DE DIOS. Y, SIN EMBARGO, los jueces, médicos, científicos, etc. de hoy
en día, parece que tienen más conocimientos que DIOS, y, nos tratan de convencer
de que los ayunos ponen en peligro nuestras vidas, que los ayunos de cuarenta
días matan, etc. ¿Quién creéis que tiene la verdad, la sabiduría y la razón,
DIOS, o vuestros científicos, médicos, y jueces, de hoy? ¿Quién creéis que
tiene más conocimientos sobre los ayunos, sobre la salud, sobre la vida y la
muerte, Dios, o, vuestros científicos, médicos, doctores, licenciados, jueces,
etc.? ¡A esto ya no voy a responderos, porque si sois racionales, ya lo deducís,
ya lo sabéis! ¿Pero quienes no tienen capacidad para deducir esto e ignorarlo
maliciosamente? Ya os lo tengo dicho muchas veces y estos son los ángeles caídos,
que son los poderosos de turno, que son ricos, poderosos de todo poder
terrenal, políticos, sindicatos, ONGs., los ateos, etc., que son todos aquellos
que viven y se alimentan de odios, rencores, malicias, injusticias, ateísmo,
discriminación, idolatría, de guerras, de asesinatos y robos, legales o
ilegales, etc., y que disfrutan y se alimentan, de todas las emociones,
sentimientos y pensamientos, que su maldad crea en este mundo. Y estos son
todos aquellos que construyen cada día, la realidad maldita de cada día de
nuestro mundo, de nuestra realidad, en donde estos se encuentran soberbiamente
orgullosos de sus obras. ¡Y estos son todos aquellos que os tratan de convencer
de que la PALABRA DE DIOS Y QUE DIOS (LA SAGRADA BIBLIA Y EL SAGRADO CORÁN) son
un cuento para tontos y para los ignorantes, y para borregos que son dominados
por las corruptas religiones de hoy en día. También os tengo dicho al respecto
de las Sagradas Escrituras, que estas en cierta medida han sido alteradas por
las religiones dominantes, pero también os dije que Estas, manejadas por poderosos
ignorantes, no modificaron lo más importe de las Mismas, y ahora ya es tarde
para hacerlo.
También
recordaros que el hombre y la mujer, son especies diferentes, por lo que
siempre será imposible que alcancen la igualdad, porque así los creó Dios (Génesis).
Y vosotros malos hombres, ángeles caídos, hombres débiles, habéis entregado el
poder Occidental a las fanáticas y radicales, feministas, que os manejan a
todos los niveles sociales, hasta tal punto, que si, en un matrimonio, el
hombre desea satisfacer sus necesidades sexuales y hacer el amor con su esposa,
y si a esta no le apetece (quizás porque ya no le quiere, quizás porque ya no
lo desea, quizás porque ya lo aborrece porque tiene ya otros amantes que le
apetecen con más intensidad, quizás porque finge estar muy cansada, etc.), y su
marido insiste en hacer el amor, y le hace el amor, porque según el matrimonio
son una misma carne, y conforman un mismo ser para completarse, y, si el hombre
insiste en querer hacer el amor, y le hace el supuesto amor, a su supuesto amor
¡Qué horror! La supuesta esposa carne de su misma carne, según el matrimonio,
va y lo denuncia por violación, y la otra supuesta misma carne se enfrenta a
una condena de cárcel, de injusto divorcio, etc., por injustos jueces que interpretan la
justicia según las nuevas leyes ordenadas por feministas fanáticas y radicales
y todos sus afines, y esto, ¡es a lo que llaman las feministas igualdad con el
hombre! ¿A que llamarán estas fanáticas radicales e irracionales, igualdad? ¡Quizás
si continúan así, terminen llamando igualdad a la violación, cuando un hombre
las mire las piernas, o se les mire el trasero, o se les mire a sus pechos
tapados por sus ropas, o simplemente, se sientan violadas en su intimidad,
cuando un hombre las mire a los ojos y les sostenga la mirada! ¡Cuántos hombres
terminaran de seguir así, por perseguir una igualdad que no existe, en las
cárceles, divorciados, etc.! Dios creó al hombre y a la mujer diferentes, y de
diferentes especies, (ya en una ocasión os dije que las abejas hacen el amor
con las flores, y son especies muy diferentes) aunque a la mujer (Eva) la
dotara de cierta genética de Adán, para que procrearan y llenaran la Tierra con
sus descendientes, y para que SOMETIERAN
TODA LA TIERRA Y LO QUE ESTA CONTIENE (Génesis), NO PARA QUE, LA TIERRA
Y TODO LO QUE CONTIENE SOMETIERA A LOS DESCENDIENTES DE ADAN Y EVA, tal como
los animalistas, naturalistas, etc., nos quieren hacer y creer, y convencer de
que primero es amar la naturaleza de las cosas [(despreciando Y DEJANDO EN
ULTIMO LUGAR, a sus semejantes, que son LA VERDADERA NATURALEZA DE DIOS, PUESTO
QUE FUERON CREADOS A SU IMAGEN Y SEMEJANZA(Adán) (Y solo a su Imagen (Eva)].
Ya
os tengo dicho, que cuando el hombre alcance LA parte de la SEMEJANZA DE DIOS, que
le corresponde por herencia, y, alcance un estado evolutivo más perfecto,
convertirá este mundo en un paraíso y volcará su amor sobre toda su NATURALEZA,
pero antes, DEBE AMAR A SUS SEMEJANTES COMO ASÍ MISMOS Y POR ENCIMA DE TODAS
LAS DEMÁS NATURALEZAS DE ESTE MUNDO, LUEGO, ESTAS NOS SERÁN AÑADIDAS.
También
añadir que en las Sagradas Escrituras se les llama también ángeles caídos a las
mujeres, además de a otros grupos de humanos, y Escrito está en las Sagradas
Escrituras, que los ángeles caídos servirán a los hombres. Es por esto, que
también se les llama en las Sagradas Escrituras, Satanás o Serpiente antigua.
“La Serpiente te morderá en el talón y tu le aplastarás la cabeza “(Génesis)”.
Esto significa que la mujer (Serpiente Antigua), que morder el talón del
hombre, le obligara a moverse, a caminar, o lo que es lo mismo, a EVOLUCIONAR,
y no permanecer parado, porque la mujer con su maldad siempre le estará tentando,
retando, molestando, y procreando, que es para lo que Dios la creó. Pero
también nos dice que el hombre le aplastará la cabeza, que significa que tiene
que dominarla y someterla a la VOLUNTAD DE DIOS, a la voluntad con el fin por
la cual fue creada.
La
mujer Occidental está hoy en día en su máximo apogeo y por encima del hombre.
Ha llegado a la cumbre. Pero en las cumbres más altas no se puede vivir y
resistir, mucho tiempo, por lo que os profetizo que muy pronto tendrán que
descender y caer, de sus soberbias alturas, para ser sometidas por los
descendientes de Adán, y así se cumplirán las Sagradas Escrituras, por mucho
que los ángeles caídos se empeñen en convencer al mundo, de que Estas, no son
más que libros vulgares, escritos por hombres vulgares, y por mucho que se
empeñen en haceros comprender y convencer, de que Dios no existe, y que es un
invento de hombres vulgares e ignorantes, para dominar a las mujeres y a otros
hombres. Y no os dejéis engañar porque os digan que yo odio y desprecio, a las
mujeres, porque no es verdad. Yo respeto y amo a las mujeres, pero a cada cual
le corresponde su sitio natural para el cual fueron creados.
Tan
solo los ángeles caídos llegan a las más altas y soberbias cumbres, por eso
descenderán y caerán al lugar que les corresponde por orden natural. Los
descendientes de Adán, nunca alcanzan las altas cumbres de las orgullosas
soberbias, sino que siempre han sido hombres humildes, sencillos y sometidos, a
la Voluntad de Dios, y a diferencia con los ángeles caídos, no son estos
quienes se encumbran, sino que, es Dios quien los encumbra.
Cristo
Maestro Andar.
ungranmonte.blogspot.com
NOTA:
Quiero advertiros que los largos ayunos de más o de menos cuarenta días, no pueden
realizarse, sino, bajo unas estrictas reglas, normas y comportamientos, además
de una buena dosis de voluntad para seguirlas y al menos un poco de fe
verdadera en Dios, y, que la mayoría de los mortales desconocen y que si no se
siguen al pie de la letra, el ayuno de cuarenta días o más, resultará mortal.
Hace unos pocos años leí una noticia de que un hombre de sesenta años, había
realizado un ayuno de cuarenta días sin comer y había fallecido. Así que tened
mucho cuidado que en internet u otros medios, informan de cómo hacer largos
ayunos, que os conducirán probablemente a la muerte, mediante una anemia
mortal. Ya que estas anemias son mortales, porque a nivel celular, las células
están programadas para desechar y no aceptar, alimentación de ningún tipo, ni
siquiera por vía intravenosa, ni con sueros, ni alimento de ninguna clase.